La amistad en tiempos de maternidad
- Meli
- 27 nov 2017
- 2 Min. de lectura

Seguro que muchas comparten la opinión que cuando te conviertes en mamá, pierdes al 90% de tus amigas. Es verdad, me pasó.
Es que el tema de conversación cambia de la juerga que te metiste anoche, a que anoche no pudiste pegar un ojo porque el bebe estaba con cólicos. Hay algunas que no entiendes, pero otras no. Simplemente te dejan de llamar para almorzar juntas, dejan de escribir en el chat de siempre o simplemente ya con las justas te hablan… “Ya les pasará y algún día entenderán” es lo único que te queda como consuelo.
Y es que ¿acaso esa amistad no era real? Porque si lo fuera, sería para siempre ¿no? O sea, no por nada nos regalamos pulseras de BFF en el cole…o nos hicimos el mismo tatuaje, o hicimos un juramento #pinkyswear, o nos fuimos de viaje juntas y prometimos ser las mejores amigas del mundo mundial. Pero si lo es, o al menos lo fue. Cumplió su cometido y es momento de avanzar y seguir hacia adelante.
“Duele ver a esos amigos que se van y no saber si vas a volver a verlos. Duele también tener la certeza de que no será así y es aún más doloroso, cuando una amistad acaba rompiéndose por circunstancias que no pudimos evitar, aunque desearámos regresar el tiempo. Pero las cosas son de esa manera. A veces necesitamos perder a personas importantes para madurar un poco, para entender que hay cosas que no debemos repetir”*.
No hay razón para tener resentimientos. Creo que es importante cerrar ese ciclo agradeciendo por los momentos vividos y experiencias pasadas. Quedará como un bonito recuerdo en tu corazón. Todas las personas que pasan por nuestras vidas nos enseñan algo y cuando lo hacen, no queda más dirección que seguir tu camino. Pero ese camino no se acaba y encontrarás otras personas, maravillosas personas que han pasado por lo que tú has pasado y te entienden perfectamente. Personas a las que conoces en momentos inesperados o en situaciones cotidianas que te harán sentir bien.
“Las amistades que se terminan no le ponen el punto final a la vida. Y una vez que nos enseñan a sacar lo mejor de una mala situación, estamos listos para conocer a gente nueva y empezar a ser amigos mejores. Nos ayudan a construir nuevas amistades”**.
¿Piensas igual?
**Amorteca.com
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