El primer cumpleaños

Estaba tranquila y pacíficamente bien hasta la semana de la recta final. Como Lucas cumple el 28 de diciembre, pues tuve que obligatoriamente mover la fecha de celebración para el 7 de enero.

Yo supuse que siempre iba a ser difícil para él que su cumple sea en el intermedio entre navidad y año nuevo. Que cuando vaya al nido y cole sus amiguitos no iban a poder ir por la fecha o que la familia diga que el regalo de navidad es el mismo de para su cumple.

Para mí es más fácil porque compro su regalo de cumpleaños aprovechando la oferta navideña, pero bueno, esa soy yo.

Estuve ansiosa y un poco nerviosa porque era la primera vez que organizaba este tipo de eventos, pero tranquila porque mi hermana Ale me acompañaba.

Es que no saben; ella es la nazi de los cumpleaños. En serio. Todo debe estar perfectamente colocado, en el ángulo correcto, el color correcto y la forma correcta. Seguramente se desesperaba porque yo no estaba siendo tan freak, pero andaba reprendiendo a mi esposo y al suyo cuando las cosas no estaban bien puestas (por eso: I love you, mina!)

Por otro lado, yo estaba tratando de acordarme si la cantidad de comida, dulces, sorpresas iba a ser suficiente o me iba a sobrar. Pensé “sábado por la mañana es difícil para algunos, seguro irán a la playa”, lo cual era una una posibilidad, pero pensé que hacerlo en la tarde iba a ser mucho más complicado. Así que no tuve muchas expectativas en cuanto a la cantidad de gente que iba a llegar, ya me había pasado antes y en fechas razonablemente libres.

Debo decir que estoy sorprendida con tanta muestra de amor y cariño hacia mi bebé. El lugar nos quedó chico, a pesar de ser un espacio amplio.

Vino mucha gente que pensé que no iba a llegar y otra que ni siquiera tiene niños pequeños como para ir a una fiesta infantil. Una amiga se vino desde la playa para regresarse a la playa otra vez. Otra desde el trabajo para acompañarnos 15 minutos y volverse a ir. Otros que ni hijos tienen pero que siempre están presentes.

Tal vez Lucas no recuerde este día, pero en mi memoria lo guardaré como “El primero de muchos”.

Gracias…¡Totales!