¿Por qué, ah?

Hace unas semanas pensé en escribir sobre esto. No quisiera caer en la coyuntura del momento ni politizar este blog, pero me hizo pensar y reflexionar en la forma cómo estaba criando a mis hijos.

Por unos días, cada vez que iba manejando hacia mi trabajo, veía unas banderolas rosadas y celestes con el famoso hashtag “con mis hijos no te metas”. No las leí el primer día, pero ya el segundo, me di cuenta que seguían ahí y las pude ojear mientras maniobraba mi carro.

Lo que más me llamó la atención era que había un mensaje que decía “La educación sexual de mis hijos es mi responsabilidad”. No me llamó la atención por considerarlo falso, sino porque mientras que la frase tenía fondo celeste, la tacha gigante estaba en el rosado. ¿Y es que acaso unos colores deben definir la sexualidad?

¿De dónde salió que los colores rosado y celeste son los que distinguen el sexo de una persona? ¿Si le pongo a mi hijo un polo rosado, ya estoy afectando su identidad? Pues al menos sería mi responsabilidad, si es que le doy crédito a lo que me dice la pancarta.

Lucas tiene un montón de cosas rosadas: el andador, el pack and play en donde duerme, un car seat, unos politos y una gorra. Todo heredado gracias a Emma.

Me pregunto entonces ¿Le estaré haciendo algún daño a mi hijo y estaré confundiendo su identidad de género por ponerle o usar cosas rosadas? ¿Por qué en una niña sería diferente? Ellas si pueden usar azul y celeste, ¿no? Pero Dios los libre de ver a un niño con un polo morado con estrellitas…¿Por qué? ¿Por qué no podría vestir a mi hijo con lo que yo (o él) quiera sin necesidad que se sienta cohibido por “el qué dirán” o las miradas tan cariñosas y respetuosas de la gente por la calle?

¿Acaso tengo que reprimir a mi hijo de sus gustos solo por “agradar” a los demás? Obviamente no estoy hablando de extremos como pintarse las uñas o la cara, pero y en la ropa? y en los juguetes? Además, ¿Que no dicen que los mejores chefs son hombres? No creo que sus padres le hayan regalado una cocinita cuando eran pequeños. Imagino que antes no era tan bien visto que un hombre quisiera cocinar. Yo lo sé porque escuché varios comentarios cuando mi hermano decidió ser Chef. No lo hizo menos hombre, creo…bueno ese tema es otro (ja!).

Los niños son inocentes hasta que un adulto cambia su visión. Yo no quiero que mi hijo se avergüence de ver My Little Pony si es que le gusta (que por cierto, lo hace). Si Emma quisiera ver Transformers o Max Steel, ¿Por qué ahí no se vería mal? ¿Por qué la presión va más en que los niños no se vean como niñas que lo contrario? Eso es algo que la sociedad maneja y está en nosotras saber qué es lo mejor para sus hijos. Y con esto no quiero decir que vestiré a mis hijos todos los días de rosado y morado…es solo que la sociedad hace que no quieran ni siquiera tener una pizca de esos colores por temor a que los demás se burlen de ellos. Y si eso pasara, ahí si diría: Con mis hijos, no te metas.

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Acá un poco de historia para que sepan de dónde viene eso de que las chicas rosado y los chicos azul.

Con este post no pretendo cambiar opiniones ni crear un debate, simplemente es mi punto de vista :)